viernes, octubre 26, 2012

Equipo vs. manada

No hay que ser entendido en fútbol, para saber que a la mayoría de los chilenos, les gusta ver a su selección paseándose por el mundo mostrando buen fútbol y ojalá siempre ganando. El actual entrenador de la selección Claudio Borghi, sin duda es un tipo querible, pero que como en cualquier organización o empresa, a juicio de muchos, no corresponde al perfil ideal del DT que la realidad actual de los futbolistas nacionales requiere.

En este sentido, el problema no es Borghi, quien es súper consecuente con su estilo de no instaurar una dictadura deportiva y preferir un proceso de aprendizaje por convicción y ser mas amigo o compinche con sus jugadores. Todo lo cual requiere como contraparte, características de autodisciplina, respeto y confianza de parte de todos los jugadores. Todos elementos básicos para estructurar un equipo que se afiate bien y se aleje de la manada o pandilla, generalmente liderada por el mas choro, pero que en materia de resultados deportivos no asegura nada. La patota pichanguera brillante del barrio le podrá ganar una vez al Coló Coló, pero las restantes  noventa y tantas veces no.

El tema principal son nuestros jugadores, los que aun por provenir en su gran mayoría de sectores de un nivel social carenciado, muchos inmaduros intelectualmente y con un desarrollo personal deficitario, al actuar en equipo lo hacen mas en manada. Por lo tanto, necesitan de un tipo de entrenador especial, mas formativo y que se asemeja mas, a la figura paterna que al socio, amigo o compinche como lo es Borghi. Quien sería un fantástico entrenador en cualquier equipo de Europa.

El medio nivela siguiendo a la mayoría, un Alexis Sánchez o un Vidal en equipos europeos, funcionan como relojito, rápidamente se acomodan al nuevo estilo, pero puestos en la manada y sin horma, aflora el viejo instinto que nivela hacia abajo, hacia la mediocridad, a capear, al menor esfuerzo, a no entrenar con lluvia, a preferir tener un día libre antes del partido, etc.

La probabilidad de que a un entrenador estilo Borghi le vaya bien con un equipo chileno, es menor que a uno con estilo Bielsa. Los resultados y la confianza del respetable así lo indican, dos de los entrenadores que han encumbrado a Chile a jugar el mejor fútbol, han sido Riera y Bielsa, curiosamente dos formadores, que hicieron escuela dejando seguidores de su estilo. Los dos alabados y respetados, por moros y cristianos, en el triunfo o la derrota, por la entrega, sacrificio, estilo, orden y regularidad en el juego. Si bien hay varios otros entrenadores de gran nivel que han entrenado a Chile, que incluso han logrado resultados superiores, estos no han sido capaces de generar el efecto e impacto que los dos primeros. Tanto en poder conseguir un férreo espíritu de equipo entre los jugadores, como en el apoyo, arrastre y convicción de la hinchada en los momentos claves que, además permanezca en el tiempo, como prácticamente ninguno de los otros pudieron lograrlo.


El desafío de la ANFP es entender que, dado el carácter y origen de nuestros futbolistas, el perfil humano y profesional por el cual hay que escoger a un DT para la selección, si es que hay alguno escrito por ahí, este debiera ser, uno en el cual encajen los dos entrenadores ya mencionados. No me cabe duda que si bien esto no asegura los triunfos a todo evento, aumentara el porcentaje y mantendrá la evolución del fútbol chileno en una curva ascendente. Al colocar a la selección en un sitial de admiración, no solo por la hinchada, sino también por las futuras generaciones de jugadores, que los miraran como ejemplo a imitar.

El Libertador de Rancagua
Mercurio de Antofagasta (30 oct 2012)
Austral de Temuco (28 oct 2012)

viernes, octubre 19, 2012

Como antes, todo mal

Al analizar los últimos dos partidos de la selección, el contraste puede nublar el análisis, ya que los primeros 20 minutos con Argentina, no tienen nada que ver con el primer partido con Ecuador y el baile que nos dieron. Como una golondrina no hace verano, la conclusión natural es que volvimos a ser un equipo de potreros, del sube y baja. Se acabo la constante metódica del juego colectivo, a todo ritmo y en velocidad pero con precisión y cuidando la pelota. Ya sea de local como de visita. Esta de regreso el juego lento, el recibir la pelota estáticos, el pase hacia atrás, el hacer tiempo, cuando todavía no se tiene nada. Amontonados en el campo propio como era antes. Y los resultados igual de malos que en el pasado, pases imprecisos sin destino y un gran porcentaje con entrega al adversario.

Hemos vuelto a especular en la cancha. Con un solo delantero adelante y jugando la pelota a la chuña, nadie puede, ese futbol de las cavernas ya feneció, pero nadie le aviso a Borghi ni al “Pillo” Vera. Ni el apelativo de este último, puesto en la banca, nos salvo. No cachamos ni una, pero que se puede esperar de un equipo que no entrena rigurosamente, con Bielsa era otra cosa. Se echa de menos la disciplina y la rigurosidad, adentro y afuera de la cancha.

La maquina roja que instauró el Profe Bielsa ya no existe, la cambiamos por un desequipo, que despeja sin precisión y donde un jugador expulsado por un patadón, al retirarse es palmoteado por el preparador físico, en lugar de ser reprendido. Un arquero jugando sólo, ataja un penal y nadie corre a proteger el arco. Se perdió la tremenda base estratégico-colectiva que habíamos ganado como equipo de selección, porque se supone que esos son, una selección de los mejores. Se nos acabo el vuelito que nos dejó Bielsa, duró como un par de partidos. Volvimos al Chile que a nadie le gusta, que ahuyenta a la gente del estadio.

Sin duda, Jadue, Yuraseck,  Ruiz Tagle y compañía, ya lo tienen mas que claro, son los responsables  de que el país se farreara un gran equipo y un mejor proceso. Ese que convirtió a un grupo de jugadores, por los que nadie daba un peso por ellos en una selección de excelencia, con puro trabajo intenso y disciplina, entrenando incluso bajo la lluvia, hoy si llueve los entrenamientos se suspenden. De un huascazo se tiro por la borda un gran trabajo, que había conseguido darle agresividad y velocidad al futbol chileno, por el contrario, lo cambiamos por el viejo y conocido esquema especulador y defensivo. Cambiamos el planteamiento ordenado y estratégico, por la improvisación sin ningún orden, ¡juguemos no mas cabros! Con esto volvieron a campear la falta de confianza, los titubeos y los desaciertos. Atrás quedo el juego en velocidad, articulado y con gran precisión. De seguir así, nuestra selección valdrá huevo para la próxima negociación con los auspiciadores oficiales, si es que no se retiran antes, la gente ya lo está haciendo.

Para que un equipo chileno funcione bien y pueda tener resultados internacionales, como los tuvo la selección y ha tenido la U. de Chile, por ejemplo, es ser en extremo disciplinados estratégicamente. Bielsa en este sentido nos enseño que todo dependía de nosotros y aunque perdiéramos, todos quedabamos conformes por la entrega desbordante, el orden táctico y el gran esfuerzo desplegado en la cancha, que impresionaba a medio mundo. ¿Alguien ha visto algo de esto en los últimos partidos de nuestra selección?

Ahora hay que cruzar los dedos para que alguna de las individualidades nos pueda salvar de la debacle, porque lo colectivo ya se funó. Incluso nos ganan con goles de corner al primer palo y además estamos volviendo a los records de expulsiones por codazos y trancazos desmedidos. Como antes, todo mal.


La Prensa Austral de Punta Arenas
El Libertador de Rancagua (20 oct 2012)
Austral de Temuco (14 oct 2012)

De esto y lo otro

Esta revuelta la cosa, el país ha cambiado y cambiará mas, como dice la canción de los Iracundos. Pero, “si los perros ladran es porque vamos avanzando”, como muchos creen que fue la frase del Quijote a Sancho, gran mito, ya que según los entendidos, esta no aparece en todo el libro. Cuento corto, la importancia de cuidar el crecimiento económico ya sensibilizo a la izquierda y por otra, el combate a la pobreza permeó a la derecha, nadie sabe para quien trabaja.

Ahora se nos viene la discusión del presupuesto, que la oposición buscará alargarla lo mas posible, para así aprovechar el minuto de fama producto de la gran atención y plataforma mediática, que representa esta oportunidad de exposición pública nacional. Sobretodo para los líderes estudiantiles y políticos, en un país tan concentrado como Chile, donde generalmente los gobiernos las manejan casi en exclusiva.

No hace mucho, los tacos del feriado dieciochero a la salida de Santiago, aun retumban pero rápidamente desaparecerán de la agenda pública, pese a que se ratifica la urgente necesidad de repensar el sistema de transportes para el futuro inmediato de Chile. Como se lo preguntaba un lector de un matutino nacional, de seguro con un eficiente sistema de trenes operando no habría existido ningún taco de las dimensiones que se vivieron ese día. El Tren al sur de los Prisioneros se escuchará cada vez con más fuerza desde las regiones sureñas.

Algunos de los herederos de los apuradores del tranco durante la Unidad Popular el año 73, que hipotecaron el futuro nacional provocándole un gran daño al país, hoy incluso intercambian roles y se afanan en subirse colados a la micro de los movimientos sociales, como la gran oportunidad para dar el asalto al poder y remover los lastres y ataduras que limitan la democracia. Métale Constituyente por un lado y por otro, no apure ganado flaco o no hay horno para bollos, como dirían Escalona y Novoa. En pocas palabras, con el Binominal y sus empates característicos, la izquierda y la derecha unidas jamás serán vencidas.

Recordando el período pre 73, se pensaba en esos días que el país, para superar la debacle político económica que experimentaba, sólo le bastaba con un Banco Central autónomo y una segunda vuelta que dirimiera los tres tercios que crispaban al país político. De los tres tercios nos pasamos de un huascazo al empate binominal, muchos podrán decir que el empate ha servido, para calmar los nervios y nivelar las expectativas. Ya que además, sin el para muchos, bien podríamos estar como Argentina, viviendo permanentemente la incertidumbre económica del sube y baja.


El problema para varios, es que Chile hizo este drástico cambio de modelo bajo una dictadura, lo que lo hace menos legitimo. Pero en lo económico, se validó un camino posible en este continente latinoamericano, cuyo desarrollo frustrado, en las décadas del 50 y 60 era la tónica y lo que predominaba, era la crónica de un fracaso anunciado. En 1980 muchos de nuestros países hermanos nos superaban en ingreso per capita, hoy estamos a la cabeza, incluso ahora último acabamos de superar a nuestros vecinos allende los Andes.

La Prensa Austral de Punta Arenas
El Libertador de Rancagua (29 sep 2012)
El Centro de Talca (13 oct 2012)
Austral de Temuco (28 oct 2012)

viernes, octubre 05, 2012

Política y elite

La gran capital, de nuestro centralizado Chile, crece mas que cualquier otra ciudad y experimenta cada vez mayores grados de violencia, cobrando la vida de un carabinero en las últimas reyertas. Frente a esta triste evolución, no queda mas que concluir, que hace rato, Santiago se le escapo de las manos a la elite capitalina. Distintas lumbreras escriben en la prensa sobre las causas y razones que llevaron al “Rata” a disparar y matar al carabinero, pero de soluciones, prevención o hacer algo coherente en el poder construir sociedad y una metrópoli inserta en un país centralista, que pueda contener y disminuir esta violencia y mal vivir, nada de nada. Secos para el diagnóstico, para el bla bla, pero de ahí a meter las manos o entender algo del tema, naca la pirinaca.

Puro discurseo sonoro y rimbombante para alimentar el ego, pero que para variar, deja el futuro y destino de nuestra principal sociedad y ciudad, sometida cada vez más, al control de las pandillas, encapuchados y ghettos, que son finalmente los que marcan la pauta o agenda. En ningún caso son, los que debieran ser, los más inteligentes, no ellos están muy cómodos en sus poltronas diagnosticando a control remoto lo que se imaginan puede pasar en la subcultura de la marginalidad, que ellos mismos han creado producto, entre otros de la inacción y la segregación.

El futuro no se ve nada de auspicioso, ya que la política, la principal responsable de generar los cambios, esta peor, con una evaluación ciudadana que cae en picada. Una política cada vez más elitista y endogámica que, para elegir a los presidenciales, los unge entre encuestas y martingalas centralistas, para luego santificarlos en procesión por las regiones, nunca al revés como debiera ser, invirtiendo la pirámide y creyendo también en la gente de regiones. Lo mismo para designar a los candidatos a senadores, ya estamos en medio de la gran repartija de regiones, que a diestra y siniestra postula solo a ministros, políticos y líderes con presencia mediática capitalina, el famoso comprahuevos. No importa que no sean de la región, da lo mismo.

La excesiva concentración de las tribunas legitimadas para posicionar los liderazgos en la capital, es una de las grandes razones de que no existan escaleras de la fama más democráticas y mejor distribuidas para posicionar liderazgos diversos y de distinto origen social y territorial, como debiera ser.

A su vez, generalmente estamos eligiendo lideres relacionados con cualquier aspecto asociado a encuestas e imagen, bajo códigos del marketing político capitalino, pero sin sopesar su trayectoria, el aporte al país, sus ideas y programas o el liderazgo político producto de su desempeño.

Pero esta elite además es sorda, ni siquiera es capaz de escuchar a la OCDE, que ha sido clara en indicar que si no se genera un profundo proceso de descentralización en Chile la productividad nacional seguirá cayendo.

Es decir, también peligran los negocios y proyectos, donde los buenos están siempre teledirigidos desde el centro y sólo los mas ñeclas, quedan para los de regiones. Como reza la canción gaucha, las penas son de nosotros las vaquitas son capitalinas.


La Prensa Austral de Punta Arenas
El Libertador de Rancagua (22 sep 2012)
El Centro de Talca (29 sep 2012)
Austral de Temuco (30 sep 2012)