viernes, enero 30, 2015

Oportunidad energética

Tal como lo expresará Francisco Starace, CEO de Enel (Endesa y Enersis) en un matutino dominical, “Países como Chile tienen una suerte increíble en estos momentos: no tiene petróleo ni gas, pero tiene otros recursos increíbles, como sol, viento y agua, y tiene una sistema administrativo que funciona (…). Por eso, nosotros estamos tan interesados en Chile. Es un país muy significativo en esta transición energética que se está viviendo en estos días”.

No es el primero que destaca esta gran oportunidad que tiene nuestro país, situación en la cual a las regiones sureñas les puede corresponder un rol destacado siempre y cuando se decidan a accionar las medidas necesarias. Esto lo hizo ver Máximo Pacheco Matte, Ministro de Energía, en su visita a la Araucanía en Enela (Encuentro Empresarial de La Araucanía) del año pasado, al comentar que “La Araucanía tiene un potencial energético enorme y que debemos aprovecharlo. Eso le va a traer progreso y bienestar a la gente de la región y el país.”

Los tiempos han evolucionado rápidamente hacia las ERNC Energías Renovables No Convencionales, donde se destacan las energías: solar, eólica, hídrica, biomasa y geotérmica, representando recursos inagotables que bien podrían caracterizar un sistema energético regional sustentable y limpio. Sobretodo en las regiones con una naturaleza y geografía notables, que las distinguen a nivel nacional e internacional.

Ya existe bastante camino recorrido en las distintas vetas de esta oportunidad energética. En biomasa la planta de Comasa en Lautaro ha sido todo un acierto, porque no pensar a futuro aprovechar la energía de vapor disipada de este tipo de plantas o de otras que generen electricidad a partir de la quema de basura, ubicándolas en las inmediaciones de alguna ciudad intermedia para dotar a esta de un sistema de calefacción domiciliaria. Asimismo en los faldeos del volcán Tolhuaca, la Central Geotermica Curacautín avanza a paso seguro y en un par de años mas se dispondrá de energía eléctrica, generada por esta vía en forma pionera en el país.

En energía solar ya se sabe de varias iniciativas, como una lechería en el fundo Miraflores de Angol, que posee una planta fotovoltaica que la abastece en un 40%. También hay experiencias con biodigestores que operan con estiércol y generan energía limpia. Por último, las minicentrales hidráulicas de paso que ya existen en distintas ubicaciones de nuestra cordillera, reafirman el potencial hidráulico de estas regiones. En lo eólico se tiene avances en distintas comunas de las regiones del Bio Bio, Aysén y La Araucanía, incluso con la participación de comunidades y pequeños propietarios. Porque no imaginar poder alcanzar metas como la de Uruguay que ya tiene un 30% de su matriz energética en base a generación eolica, incluso dejando atrás a varios países europeos que han sido pioneros en esta tecnología.

La ley de asociatividad que prepara el gobierno en el marco de  la Agenda de Energía, representa a su vez una gran posibilidad para conseguir que “los proyectos de energía se asocien a las comunidades que los acojan, para que los proyectos den un beneficio permanente que efectivamente representen bienestar, progreso y oportunidades de movilidad social a las comunidades”, como lo expresara recientemente el ministro de energía Máximo Pacheco.


El Centro de Talca
La Prensa Austral de Punta Arenas (23 ene 2015)
Austral de Temuco (25 feb 2015)