domingo, junio 13, 2010

Individuo y comunidad

Individuo y comunidad

Nadie podrá poner en duda que la sociedad que hoy en día predomina en el mundo desarrollado, es una sociedad más individualista, que difiere bastante de aquellas sociedades que el hombre construyó y aprovecho para construir, desde sus primeros asentamientos y ciudades, hasta las más emblemáticas y complejas organizaciones. Es interesante saber desde cuando proviene este cambio de tendencia, ya que el hombre, como individuo desde la prehistoría, ha tendido a fortalecer y avanzar hacia lo societario.

Este cambio humano, en la tendencia hacia el predominio de lo individual por sobre lo socio-colectivo, se pudo iniciar a nuestro juicio, con el invento del cassette de audio compacto patentado en Hannover Alemania en 1964. Este permitió personalizar e individualizar la musica, con el primer tocacassette Phillips portatil a pilas del tamaño de un libro, una gran novedad en aquella época, ya que para grabar antes del casete, estaban las grandes cintas solamente y tremendos equipos, nadie los podía llevar bajo el brazo. Este aparato, sería el gatillador de la personalización e individualidad de la musica. Lo que antes debía compartirse obligadamente y ser de deleite colectivo en auditorios, eventos sociales o a través de la radiofonía llegando a miles de auditores, con este invento podía ser ahora, de gusto y disfrute personal.

Con los años hasta nuestros días, este fenómeno ha evolucionado y experimentado una segunda revolución, calidad digital y de miniaturización, con el formato mp3, curiosamente inventado también en Alemania en uno de los institutos Fraunhofer. Sin embargo, después de algo más de medio siglo el hombre se reencanta con lo social, el individualismo exacerbado encuentra contrapeso, aprovechando otra herrramienta tecnológica comunicacional como lo es la Internet, el cambio de mirada es ahora hacia lo colectivo con las redes como FaceBook, Twitter y otras.

Pero esta dualidad entre lo individual y lo social o comunitario, es una cuestión que el hombre ha debido enfrentar desde siempre y, seguirá haciendolo, tratando de encontrar siempre el adecuado equilibrio. Esto es posible apreciarlo también en la sociedad mapuche, pueblo extremadamente individualista, en lo que corresponde a la identificación de sus derechos, lo que les pertenece y del como desarrollar sus emprendimientos, sin embargo también poseen un alto espíritu de convivencia y respeto hacia lo que su cosmovisión ordena en cuanto autoridades tradicionales y deberes comunitarios.


Conocer el como se conjuga cada uno de estos enfoques de vida en sociedades como la mapuche, resulta de vital importancia para la definición de políticas y programas de desarrollo con los cuales se les desea apoyar. No hacerlo significa equivocarse como ha estado ocurriendo por muchos años, por ejemplo con la política de tierras que aun los mantiene en la pobreza extrema. El conocimiento sobre esta relación o equilibrio, entre lo individual y lo comunitario, frente a distintas situaciones, debe incorporarse desde la etapa del diseño de los distintos instrumentos y merece investigarse con profundidad en la academia, bajo distintas especialidades, en cuanto a su evolución e influencia. Sin lugar a dudas, la  sociedad occidental y la region, pueden aprender mucho sobre el vivir en equilibrio con la naturaleza de los mapuche.  Así como la tecnología y producción sustentable pueden contribuir de manera significativa al desarrollo socio-económico de las comunidades rurales, si se adecúan al modo de vida y al respeto de sus creencias frente a cada situación en particular.

Austral de Temuco
El Libertador de Rancagua (25 ene 2014)