lunes, marzo 01, 2010

Y finalmente llegó

Y finalmente llegó

Desde hace 20 o 30 años que estábamos espirituados esperando, para la zona centro-sur del país, un terremoto similar al del año 60, ya que la acumulación de energía del movimiento de placas tectónicas así lo anticipa. Somos un país sísmico y no debemos olvidarlo nunca. Lo primero, es lamentar las victimas y acudir rápidamente en ayuda de los damnificados, en eso somos famosos hasta para llegar prestamente a Haiti a hacer la pega si se hace necesario.

Sin embargo, de inmediato hay que sacar las lecciones del caso que nos aseguren un mejor y más seguro vivir en todo nuestro territorio, teniendo presente el que deberemos vivir para siempre con este riesgo inminente, no hay otra.

Temuco esta más seguro, por su lecho de fundación sobre antiguos depósitos fluviales que, al compararlo con ciudades como Concepción, que fue fundada en muchos terrenos de relleno de antiguas lagunas, lo hace resistir mejor el impacto de los terremotos.

Hay que olvidarse de ocupar el borde costero inmediato a lo largo de todo Chile con ciudades, viviendas e infraestructura urbana de importancia, siempre estará cada cierto período de años sometido a maremotos y tsunamis. La falla comunicacional de las autoridades en la región del Biobio, al descartar la ocurrencia de tsunamis, así lo demuestra, ni siquiera nuestras principales instituciones tienen la capacidad de anticipación necesaria para minimizar el impacto de las fuerzas de la naturaleza.


La ingeniería civil y, como un profesional de esta responsablemente lo digo, le debe al país una explicación, no es posible que edificios nuevos colapsen por problemas estructurales o por daños fundacionales en la mecánica de suelos. Más aún existiendo edificios antiguos que han soportado varios terremotos y de los cuales nos enorgullecemos y somos reconocidos como país por su genial ingeniería estructural. Si la norma se flexibilizó, la fiscalización es deficiente o esta se relajó porque alguna autoridad técnica sectorial, normativa o municipal no hizo su pega, es necesario esclarecerlo y establecer las responsabilidades respectivas. Chile así lo exige.